Sobre mi gradual aceptación del Mundo o Un Revolucionario con el Espíritu Roto

No puedo evitar remembrar sobre épocas pasadas, épocas felices cuando mi inconformidad me daba felicidad, y significaba una razón mas para vivir, cuando quería comerme al mundo, había tantas cosas que quería cambiar, y en cierta medida sentía que en realidad mi inconformidad, mi rebeldía y mi desprecio al sistema y mis ideales hacían una diferencia.

Poco a poco, y sin sentirlo todo fue cambiando, lentamente mi inconformidad empezó a quedarse dormida, mis ganas de cambiar al mundo fueron perdiendo fuerza, y ahí empezó mi aceptación del mundo, tristemente aquí estoy, un revolucionario con el espíritu roto, ya no me quedan ganas (tal vez unas pocas) ni fuerzas (o tal vez solo me niego) para intentar cambiar al mundo. No se si la vida me volvió cínico y aplasto mi espíritu de manera casi imperceptible hasta moldearme en uno mas de la masa humana, o si en realidad esas esperanzas y fuerzas que sentía en un principio eran solamente un elaborado engaño de mi subconsciente, o si en realidad todo este tiempo me negué rotundamente a reconocer a esta persona que veo hoy al espejo. Las razones son irrelevantes (o no los son?), ya que aquí estoy.

No se bien si me entristece o me enoja el verme así, cuestionando mis ideales, cuestionando mi vida, cuestionando mis decisiones, cuando por mucho tiempo apoye firmemente la decision de escoger no escoger la vida, de no cuestionarme, solo ser, y hacer.

No se realmente si este es el camino natural de las cosas, si esto significa crecer y "madurar".

Y probablemente este debería ser el momento en el que concluyo con una frase alentadora en la que decido cambiar y renovar mis fuerzas, pero lo cierto es que soy egoísta, y he encontrado un lugarcito de confort no necesito salir de aquí (aunque constantemente escucho un grito desesperado que dice SAL! YA!), no se si estoy dispuesto a volver a luchar contra el sistema, a rebelarme a costa de mi vida, por algo mas importante.

El tiempo me cambio, pero sigo siendo yo, para ser sincero mis ideales siguen ahí, callados, mas no muertos, me da un poco de esperanza el pensar que mi vida actual sigue siendo objeto de controversia personal, me calma un poco el hecho de que un puedo tener una lucha interna, que aun me gusta crear demonios y ángeles vengadores, tan solo para ejercitar mi habilidad de juicio del bien y el mal. Y aun creo que el mundo puede cambiar, solo que no se si quisiera participar en este cambio.

El tiempo me cambio, y aunque no hay garantías, tal vez el tiempo me cambie nuevamente.